Desde el punto de vista nutricional, las setas se destacan por su bajo aporte calórico y se debe al enorme contenido en agua que representa entre el 80 y 90 %; el aporte es de 25 a 35 calorías cada 100 gramos. A esto se suma que actúan como una buena fuente de proteínas al contar con una composición en aminoácidos que se asemeja más a la proteína animal que a la vegetal y esta característica las transforma en un complemento ideal para las dietas vegetarianas. Además, contienen fibra y poseen un bajo aporte graso, lo que las hace especialmente recomendables para los planes de alimentación saludable.
La lista de beneficios también contempla que son alimentos perfectos para brindar saciedad debido a su alto grado de humedad. Asimismo, tienen muy bajo contenido de sodio, por lo que se suelen incluir en las dietas bajas en sal.
Los hongos son una fuente importante de vitaminas del grupo B, principalmente B2 y B3, y de precursores de vitamina D -como el ergosterol- que favorecen la absorción de calcio y fósforo. También contienen minerales esenciales para el correcto funcionamiento del organismo, y los que sobresalen son selenio, fósforo y potasio.
Lic. Magela Mallada
Nutricionista de SUAT
Mantener un estilo de vida saludable es fundamental. Para asesorarte sobre cómo confeccionar un plan de alimentación que se adapte a tus necesidades específicas, contamos con un equipo de nutricionistas en la Clínica del Estadio que podrá ayudarte aquí.